Tú estás en el punto de causa de todo lo que sucede en tu vida

Las cosas mejoran cuando tú mejoras. Las cosas empeoran cuando tú empeoras. El mundo está todo adentro tuyo. Tú estás en el punto de causa de todo lo que sucede en tu vida, sea que estés ó no consiente de ello.

Si tú estás en el punto de causa de todo lo que sucede en tu mundo, y también lo están todas las personas significa que los grupos de personas están colectivamente en el punto de causa de su mundo colectivo. El éxito y “fracaso”, los eventos en el vecindario, hasta las guerras y los desastres naturales suceden todos no debido a una sola persona en el grupo sino porque toda la gente está colectivamente causando aquello que colectivamente les está afectando. Esto nos trae a nuestros negocios.

Obtendrás resultados más rápidos si la gente con la que trabajas y te asocias son personas con conciencia de riqueza. Recuerda también que una muy poderosa manera de conseguir algo es causando que otra persona lo tenga.

Combina ambos y verás que tan ampliamente beneficioso es asegurarte que tus empleados, socios comerciales, familiares e inclusive la comunidad y el mundo- en caso de estar interesados- tengan acceso al material educativo que les permite construir la conciencia de la riqueza dentro de sí mismos.

Imagínate que estás en una isla solamente con una persona, trabajando juntos durante un año. Imagínate que ambos son muy amigables y que comparten entre sí los libros y la comida que los parientes les envían. ¿Qué pasaría si le dieras una bofetada a esa persona? Esa persona, o bien te devolvería la bofetada, encontraría otra forma de hacerte daño, dejaría de compartir los libros y la comida contigo ó bien tendría un corazón menos amigable hacia ti aunque no tomara otro tipo de represalias. Aún si la otra persona no se vengara, habría una tensión acumulada que cortaría la libertad y camaradería que tenían. Este simple experimento te muestra que te es imposible dañar a alguien sin que te retorne de alguna u otra manera. Hieres a alguien y eventualmente te causarás una herida a ti mismo. En otras palabras, si puedes observar que esto es así ¿Por qué habrías de querer dañar a alguien? Aún más exacto, ¿Por qué habrías de querer causarte daño a ti mismo ya que cuando dañas a alguien te dañas a ti mismo?

Ahora bien, si estás trabajando fuerte en tu negocio, ¿Por qué habrías de querer deshacer el trabajo perjudicando a otros en ó a través de tu negocio, ya sean tus clientes, empleados, proveedores, la sociedad ó el medio ambiente? Siguiendo con lo que pronto veremos sobre la conciencia colectiva y los resultados de ella en las secciones subsiguientes, ¿por qué habrías de ser pasivo cuando los demás perjudican a otros en los negocios? Sabes que en algún momento te afectará en forma negativa cuando permitas que una gran empresa y tu gobierno hagan negocios en forma opresiva y perjudicial, entonces porque dejarías que eso suceda mientras te sientas en la periferia a la espera de que te llegue la parte negativa de las ganancias que te

corresponden? En la medida en que permitas que las elecciones y la conciencia de los demás tengan mayor importancia que las tuyas propias, compartirás sus consecuencias. En la medida en que tú mismo determines y hagas tus propias elecciones sobre cualquier cosa, disfrutarás de tus propias consecuencias. La riqueza sigue esas reglas, tal como lo hacen las demás cosas. “A mí no me importa” no te excluye.